El sector ganadero vuelve a estar preocupado por la campaña de vacunación por Lengua Azul, que según expertos y veterinarios podría ser responsable de agravar la crisis del sector.

La vacuna contra esta enfermedad podría causar menor nacimiento de terneros y una merma en la producción de leche y carne en ovino. Por ello asociaciones agrarias han solicitado a la Junta de Castilla y León que suspenda la campaña de vacunación.

El mayor problema, según explica Juan Luís Martín Sevillano, presidente de la organización “19 de abril”, es que los problemas que causa la vacuna producen una mayor disminución del beneficio que sufrir la enfermedad.

Desde otras organizaciones se teme que la decisión de la campaña de vacunas contra la lengua azul se deje en manos de veterinarios de agrupaciones de defensa sanitaria, que son partidarios de volver más estrictas las medidas para evitar enfermedades.

Además la Junta continúa con pagando a los ganaderos las indemnizaciones por pérdida de animales durante 2009, pero el dinero, según los productores llega tarde y en menor cantidad de lo esperado.

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