Caja España y Caja Duero aceptan la voluntariedad de las prejubilaciones y la movilidad en la reunión de la mesa de negociación que se celebró ayer en Tordesillas con la patronal y los sindicatos. El próximo 18 de enero se reunirán de nuevo.

La primera reunión de la mesa de negociación del pacto laboral de la fusión entre CajaDuero y Caja España sirvió para que ambas entidades aceptasen la voluntariedad de las medidas dirigidas a los empleados en el proceso de reestructuración, evitando así las decisiones traumáticas como suponen los expedientes de regulación de empleo y demostrando esta actitud en las prejubilaciones, la reducción de jornada y, en menor medida, en las bajas incentivadas, al tiempo que asumieron evitar la movilidad geográfica, salvo razonables excepciones.

La homologación de las condiciones laborales constituyó el principal punto de la reunión, porque las cajas no aceptan la suma de las condiciones laborales de los empleados en la futura entidad porque creen que la acumulación no favorece a la viabilidad del proyecto de unión financiera.

El excedente de trabajadores y sucursales también fue uno de los temas a tratar, aunque el número no se ha discutido todavía. La próxima reunión será día 18 a las once de la mañana en Madrid.

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