Inquietud y malestar en los de los presidentes de cajas de ahorro de Castilla y León ante la inminente fusión
La fusión de las tres cajas de ahorro de Castilla y León se acerca, y la inquietud crece entre partidarios y detractores de la unión de Caja España, Caja Duero y Caja de Burgos.

Los máximos responsables de la Consejería de Economía, Cecale, CCOO y UGT compartieron una comida, para poner de manifiesto que el proceso de fusión entre las tres cajas va lento y que los tres presidentes, en su ámbito de responsabilidad, están contribuyendo con su actitud a lo que consideran ya un nuevo atasco.

La comida compartida sirvió para compartir también otra impresión: los titulares de Caja_España, Santos Llamas; Caja Duero, Julio Fermoso, y Caja de Burgos, José María Arribas, no están avanzando en llegar a acuerdos sobre los tres asuntos más conflictivos: la futura o futuras sedes, los órganos de gobierno provisionales y el pacto laboral.

Este malestar de la Junta y las tres organizaciones no se hace extensiva a los directores generales o al ámbito técnico, a los que se les reconoce que han desarrollado un intenso programa de trabajo entre septiembre y octubre.

La reunión de ayer sirvió también para que los dos líderes sindicales advirtieran de que sin ellos no será posible el acuerdo y por lo tanto las cajas no podrían beneficiarse del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, con el que el Gobierno y el Banco de España financiarían el recorte de plantilla y el cierre de sucursales que parece inevitable con el proceso de fusión, verdadero objetivo de las conversaciones en marcha.

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