Algunas empresas ya se han quedado por el camino en esta crisis y lo peor de todo es que la quiebra arrastra a los trabajadores y puede afectar a otras empresas que se las ven y se las desean para cobrar las deudas.
El aumento de morosidad es bastante considerable, sobre todo en empresas de construcción y comercio, tanto que algunos abogados están desbordados por no poder atender, todos los casos de cobro de deudas.
En una encuesta, publicada por la Cámara de Comercio, destaca que cerca de un millar de negocios están atravesando dificultades económicas y no pueden hacer frente a sus pagos, con el correspondiente aumento de la morosidad. En algunos casos son deudas de hasta 100.000 euros, desde hace más de un año, aunque la media de dinero que se debe está entre 12.000 y 18.000€.
Para poder hacer frente a los pagos algunas optan por el crédito, aunque no a todas se le concede, a un 17% le han dado un no por respuesta. Los que lo consiguen, afirman que se han encarecido los gastos y comisiones, además del aumento de las exigencias en avales y garantías.