Elegir un cerdo ibérico puro en la dehesa y que, después de engordarlo, se lo manden a casa despiezado y curado es algo que es posible desde hace ya bastantes años, gracias a las soluciones cada vez más imaginativas de los productores de porcino.
Los productores de porcino ibérico puro buscan desde hace años alternativas para dar salida a la producción y rentabilizar la inversión.
Una de esas alternativas es ofrecer la posibilidad de realizar una suscripción por la que el cliente irá recibiendo los productos según se vayan cumpliendo los plazos de curación. Según señala la Gaceta de Salamanca
Uno de esos productores es Marino Arenillas que señala que «Ofrecemos un producto de alta calidad, con un buen precio de mercado, con dos modalidades, ya sea cerdo entero o medio cerdo, además de la garantía de que si se recibe una pieza en mal estado, se lo reponemos sin coste para el cliente».
Otro productor que durante años ha utilizado este sistema de «matanzas a la carta» ha sido José Luis Urquijo que llegó a sacrificar 300 cerdos en una campaña por este sistema.