La vacuna contra la enfermedad de la legua azul, lejos de ser una solución en algunos casos se está convirtiendo en un problema, ya que los ganaderos están denunciando las muertes de los animales después de ser vacunados.
Siguen aumentando las denuncias, la última, un vaquero al que se le han muerto tres vacas y dos terneros. Aunque el caso más llamativo es el de una explotación con 40 reses muertas, su dueño se queja de que las que quedan, están débiles, se acuestan y no se levantan hasta morir.
Ante estos hechos, y la posible revacunación, los ganaderos lo han puesto en conocimiento de los responsables de la Junta de Castilla y León, por lo que se plantean no vacunar hasta que no se sepa quienes son los responsables de los animales afectados. Ya que según denuncia UPA, parece que se dan más problemas de lengua azul en las zonas de vacunación que en el resto de la provincia. Además, los ganaderos no pueden demostrar que los animales han muerto por esa causa ya que los veterinarios oficiales no recogen ninguna muestra.
Mientras, se sigue sin resultados de las vacunaciones ya que se están esperando los análisis que la Delegación Territorial, ha enviado a Madrid.
UPA tiene convocadas para hoy, asambleas informativas en Guijuelo, a la 1 del mediodía, y en la Fuente de San Esteban y Ledesma, a las 8 y media, donde unos de los temas a tratar es la problemática con la lengua azul.