Llegamos a último fin de semana de octubre y como es habitual tenemos que adaptarnos al nuevo horario de invierno. El cambio se producirá en la noche del sábado al domingo a las tres, debiendo atrasar nuestros relojes una hora hasta las dos, lo que significa que ese día tendrá una hora más.Durante la noche del sábado al domingo tendremos que adaptar nuestros relojes volviendo al horario de invierno. Este horario se mantendrá en toda España hasta finales de marzo de 2013, donde de nuevo se cambiará al horario de verano para intentar aprovechar más los recursos naturales de la luz diurna.
A pesar de opositores y partidarios de esta medida, lo cierto es que el cambio de hora significa tener que adaptarnos a nuevas situaciones que sobre todo se notan a la hora de levantarnos y de acostarnos. Aunque no se alarmen según los expertos los posibles cambios en nuestro organismo se producen de forma temporal y en un par de días lo tendremos completamente superado.