Las autovías públicas portuguesas que comunican Portugal con las zonas fronterizas de las provincias de Zamora y Salamanca, comenzará a ser de pago a partir del día 8 de diciembre, incorporándose al régimen de pago instaurado por el Gobierno luso en octubre de 2010.
El Gobierno portugués ha promulgado un decreto por el cual se autoriza el cobro de peajes en las autovías a partir del día 8 de diciembre, de este modo la A-25, que sirve de conexión entre Salamanca y Portugal con entrada por Fuentes de Oñoro, dejará de ser gratuita con la entrada en funcionamiento del sistema electrónico de peajes.
Después de meses de espera, los pórticos en los que están instalados los sensores y las cámaras con las que se efectúa el cobro y el control de los vehículos que circulan comenzarán a funcionar, lo que obligará a todos los que circulen a abonar un coste por kilómetro.
La determinación, de la que se lleva hablando meses, siembra la preocupación en las zonas fronterizas porque, allí donde ya está instaurado el pago, ha supuesto una importante reducción de tráfico y de movimiento económico. Como ya ha sucedido con Galicia cuyos intercambios económicos se han reducido un 20% desde que se instauraron los peajes, ya que hay menos turismo; y en el caso gallego miles de viajeros que utilizaban el aeropuerto de Oporto han dejado de hacerlo. Y el tráfico interno se ha reducido un 40%, desviando mucha circulación a las congestionadas nacionales portuguesas.
Aunque todavía no se ha facilitado las tarifas, el coste de un recorrido completo rondará los 7,5euros.