Castilla y León se ha convertido en la primera comunidad que aborda el teletrabajo en el ámbito público. Desde el próximo día 23 de mayo los empleados de la Junta podrán trabajar desde su casa. En pijama, sin peinar, con un café de la mano y sin tener que salir de casa, así puede comenzar la jornada laboral algunos de los trabajadores en nómina de la Junta.
Pero eso sí, no podrán ser todos los empleados los que podrán solicitar trabajar desde casa tres días a la semana. Lo podrán pedir los que sean funcionarios, laborales, estatutarios o docentes, siempre que no trabajen en una oficina de registro, información o atención al ciudadano o aquellos que por su labor requieran de una participación presencial. Tampoco pueden trabajar desde casa el personal de las secretarías de los altos cargos y los empleados públicos que trabajen en: dirección, coordinación o supervisión, es decir los jefes de servicio y sus superiores.
Los que quieran trabajar en casa deberán tener al menos dos años de antigüedad y tener conocimientos suficientes en informática y telemática, además tendrán que tener un ordenador y una conexión que cumpla los requisitos de disponibilidad tecnológica y de seguridad.
Desde la Junta afirma que estos trabajadores deberán justificarse por objetivos y el criterio de control será la productividad.
De momento el teletrabajo en la Junta será un experimento que se probará durante seis meses y tienen previsto que se acoja al menos un centenera de empleados.
¿Les manda la Junta? como, ¿Por correo? Si en la noticia pone que lo podrán elegir los funcionarios….. Creo que la presentación de la noticia es cuando menos propia de los siglos con derecho a pernada.