El número de personas consideradas “ricas” descendió en torno a un 18% entre los años 2007 y 2009. Las consecuencias de estos descensos también se han notado en las inversiones que han descendido en nuestra provincia con 540 millones menos entre los dos años.
La crisis afecta a todo el mundo, también a los considerados “ricos” que son aquellos que disponen de un patrimonio superior a los 300.000 euros, ya que el número de particulares que tienen más de este patrimonio financiero descendió un 13% en la capital y un 17,67% en la provincia entre los años 2007 y 2009, lo que también significa de dos de cada diez potenciales inversores han desaparecido.
La situación de desconfianza provocada por la mala situación económica y el descenso de liquidez generado por la crisis han tenido graves consecuencias en los bolsillos salmantinos, por lo que también se ha terminado la inversión perdiéndose dos de cada diez potenciales clientes de la banca privada. Los datos de nuestra provincia superan la media de la Comunidad y duplican la media nacional, donde sólo se han visto afectados el 9% de los ricos españoles.
A la vez también se ha visto afectado el volumen de negocio que ha disminuido, de esta forma mientras que en la capital la banca privada ha tenido 180 millones menos de inversión en 2009 que en 2007, con un descenso del 12%, en las zonas rurales han desaparecido más de 340 millones, lo que significa un descenso del 10 por ciento.
También tenemos que decir que en nuestra provincia tenemos a un rico más, ya que un boleto agraciado con 6 aciertos de la bonoloto de ayer, ha sido sellado en una administración de Santa Marta de Tormes.