Si bien los industriales protestan por los precios que está alcanzando el cerdo en nuestra lonja provincial, no son pocos los que prefieren criar sus propios cerdos. Mas tarde se ven obligados a venderlos a otras fábricas por haber cubierto el cupo de género.
La campaña navideña que está a punto de empezar está llena de incertidumbre por la situación de un mercado que cada vez muestra peor cara. Para este final de año los industriales se muestran mucho más cautelosos que el año pasado por no saber que hacer con el exceso de producto que se puede producir si el mercado no responde bien.
La cotización en lonja de los cerdos de bellota comienza la semana que viene y los fabricantes son reticentes a llegar a acuerdos con los ganaderos debido a la poca cantidad de ventas que se prevé para la próxima Navidad.
Muchos industriales habían decidido criar sus propias partidas de cerdos para no depender más tarde de los precios de mercado que podrían ser muy desfavorables debido a la escasez de animales.
El problema estriba en que ahora son los industriales los que ponen a la venta sus cerdos debido a que ya tienen cubierto el cupo de género y no quieren tener bodegas llenas de jamones sin negocio a la vista.
Desde el sector se apunta a una nueva reducción del precio del jamón ibérico, que ya está muy bajo, lo cual reduciría drásticamente la ganancia de toda la industria chacinera.