Los criadores del cerdo celta gallego comercializarán su producto tras curarlo en Guijuelo. Los 270 socios pretenden crear una nueva línea de producto comenzando con 3.000 ejemplares.
La Asociación de Criadores de Porco Celta celebró una asamblea general en Lugo donde determinaron dar el impulso necesario para la puesta a la venta del productos derivados del Cerdo Celta. El vicepresidente del colectivo y gerente de la cooperativa Oural de Beariz, José Balboa, apunta que ‘esta iniciativa va a repercutir positivamente en la gestión y el desarrollo de las 270 explotaciones porcinas que poseemos en las cuatro provincias gallegas’ según señala hoy el diario Región.es.
El volumen de comercialización que totalizan los socios de Asoporcel en las provincias de Ourense, Lugo, Pontevedra y A Coruña, ‘supera actualmente los 3.000 ejemplares, además de unas 700 cerdas exclusivas para la gestación y que suelen dar a luz un mínimo de entre 10 y 15 crías’, señala el ganadero de Beariz. Los cerdos de raza celta no pueden ser sacrificados antes de los 14 meses de vida con el fin de encontrar el mejor grado de distribución proteínica y grasa en su carne, etapa en la que alcanzan un peso que oscila entre los 160 y los 180 kilos, ‘y que se traduce en unos 120 kilos de carne en canal’.
Antes de escoger Guijuelo, el colectivo visitó otros lugares donde la producción de porcino es importante como Extremadura.