En tiempos de crisis ya no se piensa tanto en irse unos días a la playa, algunos prefieren el turismo de interior que en los últimos tiempos es la opción preferida. Aunque se nota que hay menos dinero y son menos los que tienen la oportunidad de hacer una escapada.
El turismo rural descendió un 8,37% respecto al año anterior, al igual que bajó el número de pernoctaciones un 5,37%. Aun así, estas cifras sitúan a Castilla y León como la primera región en número de pernoctaciones.
El número total de días que se permanece alojado también ha bajado pasando de 4,7 a 3,7, aunque los alojamientos han crecido en número llegando hasta 2.604, con más de 23.000 plazas disponibles, que dan trabajo a 4.205 personas.
La mayoría de los que prefieren hacer turismo rural, son residentes en España y eligen hacer una escapada de fin de semana, en vez de pasar sus vacaciones.
En Salamanca había abiertos en el mes de agosto 406 establecimientos rurales que fueron ocupados en su mayoría por madrileños que son los que más eligen nuestra provincia para escaparse.