La plaza de El Altozano se convirtió en taller de encaje de bolillos el pasado sábado con la celebración del II Encuentro Nacional de Encajeras “Villa de Guijuelo”. En torno a cien participantes disfrutaron del buen tiempo que permitió la celebración de las actividades al aire libre.
A las diez de la mañana se reunieron en la conocida plaza guijuelense las representantes de cada grupo que vino de visita, muchos de ellos repitiendo su estancia del año pasado. Angelita Martín, organizadora del evento, quitó importancia a que el número de encajeras fuera inferior al de la primera edición y comentó que se respiró un buen ambiente de trabajo.
Durante más de tres horas el público pudo acercarse para observar como realizaban sus labores en las diferentes mesas. Las participantes procedían de diversos puntos del país como Móstoles, Cantabria, Asturias, Salamanca y Béjar, además de diversos profesionales que asistieron con productos a la venta procedentes de Madrid, Vigo y La Coruña.
La reunión terminó a las dos y media con la presentación de los trabajos realizados, algunos de ellos dignos de elogio. Maye Álvarez, concejal de cultura, calificó de muy buena la experiencia, repitiéndose el éxito de la primera edición.
A continuación se ofreció una comida de hermandad y cada encajera recibió una bolsa con diferentes presentes, incluyendo productos y ibéricos y diversos regalos de parte del Ayuntamiento de la villa.