La Diócesis de Salamanca ha emitido un comunicado en el que confirma la denuncia del que fuera sacerdote de la iglesia de La Purísima por un presunto delito de abusos sexuales cuando él era menor. El comunicado ratifica la información publicada por el periódico La Gaceta, donde apuntaron que un presbítero denunció a otro sacerdote de la Diócesis por abusos cuando éste era menor.
La Diócesis, además, en su comunicado indica que el informe final de la investigación de los hechos fue remitido al Dicasterio para la Doctrina de la Fe de la Santa Sede en Roma, y en la actualidad, el proceso continúa abierto a la espera de una resolución. “Al conocer este hecho, el obispo de Salamanca, Monseñor José Luis Retana, y después de escuchar a ambas partes por separado, tomó la decisión de apartar al presbítero presuntamente acusado, que mantenía labores activas en todos los ámbitos de la Diócesis de Salamanca, de todas sus tareas pastorales y del contacto con menores a la espera de que concluya la investigación de la Congregación para la Doctrina de la Fe”.
En todo momento, el obispo se puso a disposición del denunciante, ofreciendo toda la ayuda necesaria. Y a petición suya, y de acuerdo con el obispo, decidió irse un año fuera de la diócesis, situación que ha sido prorrogada por un tiempo.
Tras el comunicado y de manera personal, el obispo de Salamanca, ha escrito una carta dirigida a los fieles en la que hace referencia a estos hechos y en la que recuerda que la Iglesia está comprometida en la lucha contra los abusos sexuales y de poder.