El verano, con la ausencia de lluvias, está provocando que siga descendiendo el nivel de agua acumulada en el embalse de Santa Teresa que en estos momentos se encuentra al 62,70% de su capacidad con 311 hectómetros cúbicos almacenados.
Sigue le descenso progresivo en el pantano, perdiendo entorno a 13 hectómetros cúbicos semanales, lo que hace que en estos momentos el embalse guarde en sus compuertas 311 hectómetros cúbicos. Estas cifras se encuentran en niveles normales ya que contamos con un 19,15% más de agua que el año pasado por estas mismas fechas y un 2,66% más que la media de los últimos diez años.
Por lo tanto, parece que un bien necesario como es el agua, está garantizado para lo que resta del año hasta que lleguen las lluvias y los deshielos, aunque para eso tendremos que esperar.