Junta de Castilla y León y el Gobierno central han anunciado el comienzo de una campaña de control a empresas en prevención de la covid-19 en la que participarán inspectores del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Se desarrollará en dos fases: la primera se prolongará hasta el 9 de agosto, mientras que la segunda, se realizará a partir del 10 de agosto. Durante las mismas se realizarán visitas a los centros de trabajo para verificar que se cumplen las medidas de prevención, contención y seguridad frente a la pandemia.
El incumplimiento de las normas podría acarrear sanciones de entre 2.046 y 40.985 euros, en la parte estatal, por su parte las multas aplicables por la Junta oscilan entre los 100 y los 600.000 euros, en ambos casos dependiendo de la gravedad.