La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, indicó en el día de ayer que el Ejecutivo estudia flexibilizar el escenario marcado de desescalada y permitir el paso a la fase 1 de zonas básicas de salud con una tasa de 20 casos positivos semanales por cada 100.000 habitantes, o lo que es lo mismo 2 casos por cada 10.000 habitantes.
Eso sí, siempre que se cumplan con los requisitos sanitarios de aislar a las personas infectadas, poder realizar los test moleculares de PCR en 24 horas, tener capacidad de vigilancia epidemiológica para controlar a los contactos de los infectados y atender los criterios de movilidad y de instalaciones fijados a nivel Nacional.
Esos casos positivos hacen referencia a los registrados mediante tests PCR y en los últimos 7 días.
Por último, la Consejera señaló que las ciudades más grandes serán consideradas una única zona básica de salud.