La Universidad de Salamanca ha aprobado diferentes medidas para adaptar la actividad docente y evaluadora del curso actual, con motivo de las circunstancias especiales provocadas por el covid-19.
El Consejo de Gobierno de la Universidad de Salamanca ha aprobado una adaptación tanto de la actividad docente, como de la evaluadora para el curso 2019-2020, como consecuencia de la emergencia sanitaria.
Debido a que se sustituyeron las clases presenciales por las no presenciales y a la situación de restricción de movilidad interprovincial que impide que estudiantes puedan regresar a sus campus para hacer los exámenes, se ha optado por realizar una evaluación no presencial, objetiva, justa y con garantías. Para ello se pondrá en marcha un Plan que refuerce el campus virtual y haga posible los exámenes online.
Por otro lado, se decidió ampliar la oferta académica para el curso 2020-2021, con un nuevo grado de Antropología y cuatro másteres oficiales en las facultades de Bellas Artes, Biología, Ciencias y Economía y Empresa.
Además el Comité de Seguridad y Salud de la USAL, ha empezado a planificar la desescalada, comenzando con las actividades administrativas y de investigación que en la medida de lo posible, seguirán optando por el teletrabajo para garantizar la seguridad y minimizar el riesgo de propagación del covid-19. Todos los trabajadores recibirán una serie de recomendaciones que se irán revisando periódicamente, atendiendo a las autoridades sanitarias, como medidas preventivas.