En el Dakar, tras la jornada de descanso en el día de ayer se celebraba la séptima etapa entre Riyadh y Wadi Al-Dawasir en la que Lorenzo Santolino retomaba la competición en un día trágico por el fallecimiento del portugués Paulo Gonçalves, uno de los pilotos más queridos de la caravana dakariana. Su muerte ha consternado a todos los participantes y ha marcado la etapa, que era la más larga de esta edición, y que ha pasado a un segundo plano.
El domingo se retomaba la carrera tras la jornada de descanso con una etapa interminable, y con la especial más larga del Dakar 2020, más de 500 kilómetros contra el crono y más de 700 en total. Santolino volvía a encontrar su mejor ritmo y se olvidaba de los problemas mecánicos, para finalizar en décimo quinta posición a 16:54 minutos del vencedor de la etapa, el argentino de Honda, K. Benavides. En la general, el de Guijuelo es décimo sexto a 2:46:35 del líder, el americano de Honda, R. Brabec.
Hoy se tendría que disputar la octava etapa con salida y llegada en Wadi Al-Dawasir pero debido al fallecimiento del portugués Paulo Gonçalves, la organización ha decidido anular la carrera de motos y quads en memoria del piloto de motos.