La vendimia, que permitirá la posterior elaboración del vino en la provincia de Salamanca, se ha iniciado esta semana con una nota dominante: la calidad de la uva.
Este año la cantidad de uva a recoger en la provincia de Salamanca será algo menor a la de otras campañas. Aunque este aspecto hay que tenerlo en cuenta comparándolo con la calidad del producto, que este año será un poco más bajo que en ejercicios anteriores.
Otro de los apuntes de este inicio de vendimia, de la Denominación de Origen Protegida Sierra de Salamanca, es que en esta ocasión se ha dado comienzo a la campaña con alguna semana de retraso respecto a lo previsto inicialmente. En este sentido desde la DOP Sierra de Salamanca apuntan, en relación con la añada 2018, que “ha estado marcada por las elevadas precipitaciones y bajas temperaturas del final de invierno y primavera, así como un verano con temperaturas máximas menores de lo habitual. Esto ha provocado un retraso en el ciclo y un inicio 10 días más tarde de la media”.
Por cierto, este año se espera recoger unos 320 mil kilos de uva, que permitirán poner en el mercado, en su momento, unas 260 mil botellas de vino. Para ese ejercicio cuentan con 100 viticultores, que trabajan unas 120 Ha, en más de 500 parcelas. La uva será transformada en las seis bodegas que forman parte de la DOP a las que se unirán, en los próximos días, otras dos más.