Los vecinos de Sanchotello se reunieron un año más para celebrar la bendición de los campos en la Bendita Cruz de la localidad con una gran romería y una misa al aire libre en la que participaron dos centenares de personas.
La mañana comenzó con la concentración de caballistas procedentes de varias localidades del sur de la provincia y de Cáceres, juntándose en torno a medio centenar de jinetes con sus monturas. Tras la celebración de pruebas hípicas, concurso de doma y obstáculos se ofreció una comida para todos los presentes.
Ya por la tarde se reunieron los caballistas y los vecinos en la ermita de la localidad y desde allí partieron en romería hacia la Bendita Cruz. Pese a que el tiempo no era el más adecuado, los presentes desafiaron la intermente lluvia y celebraron la misa y la bendición de los campos por parte del párroco de la localidad. La jornada finalizó con un convite de carne a la brasa para todos los presentes.