Los nuevos estudiantes universitarios de la capital salmantina sufren las tradicionales novatadas con la Plaza Mayor como testigo
Con el comienzo del nuevo curso y la llegada de los nuevos universitarios a Salamanca, llegan también las novatadas. Septiembre es por excelencia el mes de los «novatos» en Salamanca. La imagen de grupos de chicos y chicas, vestidos de las peores guisas, con las caras pintarrajeadas y cantando canciones que despertarían a algún que otro muerto, ya son tradicionales en los primeros días del mes por la Plaza Mayor salmantina.
Los colegios mayores o residencias son el seno de las novatadas. Los veteranos asumen el «control» y realizan actividades, de «bienvenida» para ayudar a la integración de los chicos nuevos y facilitar las relaciones. En definitiva, la «novatadas» ya no son lo que eran. Son una manera sana y divertida de comenzar el curso, no afecta a las personas ni a su intimidad.