Las compañías de seguros son las más perjudicadas al descubrir 65.000 casos de intento de fraude, lo que ha supuesto evitar un desembolso de 171 millones de euros.
Las personas con problemas económicos son las que más intentan el engaño con algún tipo de seguro, al simular siniestros en accidentes, roturas de cristales, incendios si hablamos de automóviles y robos en incluso invalidez en accidentes laborales y del hogar, según el estudio de ICEA en el ámbito nacional.
En el 81% de los casos de engaño a las compañías aseguradoras de los automóviles, el defraudador directo es el asegurado, aunque en el 11% es el contrario; en el 1,58% el reparador y en el 5,5% otros profesionales.
En cuanto a Salamanca se descubrieron 438 intentos de fraude en 2006. La mayor parte de ellos (350), como en el resto de las provincias, se concentra en el sector de los automóviles, donde se pretende conseguir un beneficio económico superior al establecido en la póliza. El resto de los casos se localizaron en las pymes, comercios, hogares, comunidades y en las pólizas de responsabilidad civil (78), correspondiendo la menor incidencia (5) a las pólizas de vida, invalidez y salud.
Lejos de disminuir, el fraude de los salmantinos a sus aseguradoras ha crecido más de un 10% en 2006 y otro tanto en 2005, según la última estadística publicada por la asociación Investigación Cooperativa entre Entidades, Aseguradoras y Fondos de Pensiones (ICEA).