
Falta de intensidad, dejadez, falta de actitud, fueron algunas de las frases utilizadas por Rubén Gala al término del encuentro, donde el Valladolid Promesas le pasó por encima al Guijuelo, por 5 goles a 1.
Debido a la cantidad de lesionados, Gala tuvo que apostar por una defensa formada por Expósito como lateral derecho, Javi Hernández y Mario Robles como centrales y Morales como lateral izquierdo.
La primera parte del conjunto guijuelense fue aceptable, con varios momentos clave, en el 14 Pana no acierta delante del portero, en una ocasión clarísima y en el 35, los locales acertarían en un fallo de concentración defensiva, con el tanto de Jorge Delgado. De nuevo los errores de bulto en las áreas penalizaban al Guijuelo.
En la reanudación, Yenerey tuvo el empate, pero falló ante Fer, y al minuto Xavi Moreno le gana la espalda a la defensa para hacer el 2 a 0. A partir de ahí, debacle, el Guijuelo no reaccionaba, parecía una marioneta, y el Valladolid hacía tercero de penalti, el cuarto en el 64 y el quinto en el 72, sin dejar de lado, algún que otro palo. Al final Izan maquilló el resultado en el descuento, en un choque para olvidar, especialmente por lo visto tras el segundo gol.
