La organización agraria Coag indicó ayer que la nueva normativa regional sobre explotaciones ganaderas puede dejar en situación alegal a más de un millar de granjas en Salamanca. El cambio de norma afecta a las licencias ambientales cuyo plazo de concesión es muy corto.
José Luis González, presidente provincial de Coag, indicó que más de un millar de ganaderos podrían encontrarse en “una grave situación de alegalidad” si se aplica la ley 5/2005 por la cual se pretendía regular todas las explotaciones ganaderas de la región a través de la concesión de una licencia ambiental.
Según la organización agraria, el plazo para saber si dichas licencias se concedían acababa ayer, lo cual ha generado un cuello de botella administrativo, puesto que los registros están saturados desde hace tres meses lo cual dejará fuera a muchos granjas y no por dejadez de los ganaderos. Actualmente son casi 800 los ganaderos que no han obtenido su licencia, que podrían llegar a mil en los próximos días.