Pablo Espina en el encuentro ante el Calahorra

Una vez finalizada la temporada, esta vez antes de tiempo, debido a la crisis sanitaria, es hora de hacer balance. El C.D. Guijuelo, un año más, ha cumplido el objetivo que se marcó a principio de campaña, mantener la categoría, pero al igual que la pasada, ha conseguido premio, jugar una nueva edición de la Copa del Rey.

Podemos decir que el conjunto de Ángel Sánchez ha ido de menos a más, con una primera vuelta, muy irregular. A pesar de sumar dos victorias en los primeros cuatro partidos, el equipo no volvió a ganar un partido hasta la décimo cuarta jornada, al imponerse al Athletic B. Durante ese tiempo acumuló nueve semanas sin ganar. Tras esa victoria, la dinámica seguía siendo muy inestable, y el choque ante el Valladolid B, el 22 de diciembre, fue un punto de inflexión. Ese empate en los últimos minutos fue el cambio que necesitaba el equipo, la directiva confió en el trabajo de un cuestionado, hasta el momento, Ángel Sánchez, y el trabajo comenzó a dar sus frutos. A la jornada siguiente el Guijuelo se impuso con claridad al Izarra en casa, para terminar la primera vuelta en puestos de promoción por el descenso, con 16 puntos, los mismos que varios equipos que estaban en descenso.

La segunda vuelta fue otra historia, de hecho, el Guijuelo era el segundo mejor equipo con 18 puntos en los nueve partidos que se habían disputado hasta el momento, solo por detrás del líder, la UD Logroñés, es más había conseguir recuperar el fortín del Municipal de Guijuelo, que perdió en el primer tramo de la temporada. El único conjunto que consiguió ganar al C.D. Guijuelo en este segundo tramo fue el Alavés B. Por lo tanto, la línea de Guijuelo era ascendente, la plantilla daba sensaciones de seguridad defensiva y en el ataque veía puerta con facilidad, la duda está en donde podría haber llegado este equipo. Lo único que podemos saber es que ha finalizado esta liga ‘atípica’ en novena posición, que le da derecho a jugar la próxima campaña, salvo cambio de última hora por parte de la Federación, una nueva edición de la Copa del Rey.

En resumen, el Guijuelo cumplió su objetivo, pero la duda que nos queda, es saber si ese premio de la Copa del Rey pudo ser mayor.

Por cierto, en cuanto a los jugadores, ha sido el año de Pablo Espina que ha destacado por encima del resto. El asturiano ha sido el máximo goleador del equipo con 11 dianas, y por lo tanto se ha hecho con el premio Grupo Garbla de Radio Guijuelo al máximo goleador, además ha obtenido el premio Cavere Asesores al futbolista más regular con un total de 22 puntos.

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