Los jóvenes castellanos leoneses deben destinar casi el 40% de sus ingresos para poder emanciparse en régimen de alquiler. La media nacional se eleva al 43,3 por ciento.

Los jóvenes cada vez lo tienen más complicado para dejar la casa de sus padres y poder emanciparse. El esfuerzo que supone a los jóvenes de Castilla y León emanciparse en régimen de alquiler alcanza casi el cuarenta por ciento de los ingresos que perciben, frente del 43,3 por ciento a nivel nacional. Por sexos, en las mujeres el porcetaje se eleva al 42,2 por ciento, mientras que en los hombres, es del 36,4 por ciento, con cifras para España del 45,7 y 40,2 por ciento, respectivamente, según los últimos datos ofrecidos por el Ministerio de Vivienda.

Las ayudas que ofrecen desde el Gobierno siguen siendo escasas para los jóvenes. En nuestra provincia, más de 3.300 salmantinos reciben la ayuda de 210 euros del Ministerio de Vivienda, seiscientos más que en verano, aunque es el menor incremento porcentual de Castilla y León.

Estas ayudas fueron recientemente objeto de polémica, pues el Ministerio de Vivienda avisó a algunos perceptores de las ayudas que, según la información remitida por la Agencia Tributaria, superaron en 2008 los 22.000 euros anuales de ingresos brutos, requisito fundamental para recibir la ayuda al alquiler de 210 euros, por lo que deben devolver dicha ayuda.

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