La Junta de Castilla y León se reúne con el Estado para tratar sobre la gestión regional del río Duero y así llevar a cabo el orden de encuentros planificados para traspasar la competencia al gobierno autonómico.

Aunque en el día de hoy se produce la primera reunión, la Junta lleva tiempo planificando los pasos a seguir y la Consejería de la Presidencia envió a mediados de enero un documento al Ministerio de Política Territorial en el que recogía las competencias que quiere gestionar en materia de agua.

El siguiente paso será la reunión de hoy de uno de los tres grupos de trabajo surgidos en el seno de la comisión bilateral formada por Castilla y León y el Estado, con un total de doce representantes de ambas administraciones.

Lo que se tratará en este encuentro es la gestión del agua en cuatro puntos muy concretos: usos y aprovechamientos del agua; protección y tutela del agua; obras hidráulicas tanto en materia de gestión como de ejecución y cooperación y tutela con las comunidades de regantes.

Una vez estudiadas las propuestas se abrirá un plazo de un año para cerrar el coste de las trasferencias y asumir las competencias el 1 de enero del 2012.

A priori, el único punto conflictivo, sería la condición internacional que tiene el Duero puesto que vierte sus aguas a Portugal y el país luso tiene además comprometida una cantidad de agua del río recogida en el Tratado de Albufeira. Aunque el consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago, ha reiterado por activa y por pasiva que este hecho no supone ningún problema para el traspaso.

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