Los presidentes y directores generales de Caja Duero, Caja España y Caja Burgos vuelven a reunirse en Madrid con el Banco de España para perfilar los últimos detalles de la futura fusión, un encuentro al que también está convocado el vicepresidente económico de la Junta de Castilla y León.
Después de que se definan los últimos acuerdos, será el momento de presentar los detalles a los diferentes consejos de administración, algo que puede suceder antes de que acabe el mes y después a las asambleas que serán las que definitivamente darán su visto bueno al proceso.
Por lo visto dentro de la posible fusión, sólo queda por resolverse donde estará la sede central de la macro caja ya que la solución de Valladolid como decisión salomónica no agrada a las sociedades salmantinas, leonesas y burgalesas. Además de los puestos de trabajo que aporte la sede central.
Por lo tanto, podríamos decir que la fusión de las cajas es inminente ya que a todo el mundo le favorece esta unión, salvo por ese pequeño detalle de decidir donde va a estar ubicada la sede central de la macro caja. Lo que también aportará la fusión será una reorganización y muchas entidades cerrarán al estar duplicadas, como le puede pasar a una de las de Guijuelo.