Se trata de una de las medidas que ha decidido el Gobierno para aumentar la recaudación de las arcas públicas. El IVA general subirá hasta el 18%, mientras que el reducido aumentará un punto y se situará en el 8%. Un incremento que supondrá un ingreso de 5.150 millones de euros.
Los sistemas de ahorro verán su tributación aumentadas hasta el 19 y el 21%. Además la ayuda de 400 euros contemplada en el IRPF desaparecerá, lo que supondrá unos ingresos en total para el Gobierno de 10.950 millones de euros en los próximos dos años. En torno a 6.500 millones de euros en 2010 y el resto en 2011.
Las reacciones a esta subida generalizada de los impuestos no se ha hecho esperar y la oposición, a través de la portavoz del Partido Popular, Soraya Sáenz de Santamaría ha declarado que las medidas se han tomado para: “tapar el tremendo agujero del gasto que ha practicado el Gobierno”. Además de poner en evidencia: “la incompetencia del Gobierno para salir de la crisis”.