La Junta de Castilla y León quiere animar a los usuarios de calderas de gas atmosféricas a modernizarlas y sustituirlas por las estancas que evacuan los humos directamente al exterior y por lo tanto son más seguras.
Para facilitar estas sustituciones de calderas se podrá disponer de una subvención de 200 euros y así poder cambiar las obsoletas calderas atmosféricas por las estancas, que toman el aire directamente del exterior y evacuan los humos también directamente al exterior sin posibilidad de contacto alguno con el local en el que se instalan, evitando así las intoxicaciones por monóxido de carbono.
El Gobierno regional aportará una ayuda de 112 euros por cada caldera que se sustituya por otra estanca y otros 132 euros más si además la caldera es de condensación. Con las aportaciones de Feincal (Federación de asociaciones empresariales de agua, saneamiento, gas, calefacción y climatización) y las empresas suministradoras y distribuidoras, la ayuda será de 200 euros para las calderas estancas y de 220 euros si las calderas son de condensación. Martín Tobalina añade que, si se suman a esta iniciativa los fabricantes de calderas, como el año pasado, la subvención podría ser de 330 euros.
Aunque esta ayuda puede llegar a ser insuficiente ya que las calderas estancas se encuentran en el mercado desde 1.000 euros hasta 2.500 euros siendo estos los últimos modelos de condensación.
En cuanto a las preferencias de los salmantinos estos se decantan por el gas natural, frente al gasoleo, el propano, el carbón, los paneles solares y la calefacción por biomasa.