La jornada del Lunes de Aguas se vive con gran intensidad en toda la provincia. Tanto trabajadores como estudiantes esperan la hora de comer para disfrutar de una jornada en el campo.
La tradición indica que los trabajadores cuentan con la tarde libre en sus puestos laborales como parte implícita de esta fiesta popular que se celebra prácticamente en todas las localidades de la provincia salmantina.
Los estudiantes de los colegios asisten a clase de manera habitual, pero en los institutos los más jóvenes suelen tomarse la licencia de comenzar antes el Lunes de Aguas. Una práctica muy común en el pasado, pero que actualmente no afecta demasiado a las clases, tal como indicó Sonsoles Montejo, directora del IES Vía de la Plata.
Por lo que la picaresca salmantina a la hora de celebrar el Lunes de Aguas se sigue manteniendo, pero en menor medida en cuanto al absentismo estudiantil.
A la hora de comer, tanto los alumnos de los colegios y el instituto, así como la mayoría de trabajadores acudirán a comer el hornazo con familia o amigos en diversos lugares como parques, merenderos o en la orilla del Tormes.