Para la llegada del invierno aún queda bastante tiempo, pero en la Junta de Castilla y León piensan que ser precavidos vale por dos, por lo que ya preparan el operativo para luchar contra la nieve.
Ayer se realizó en Salamanca una reunión presidida por el delegado territorial de la Junta, Agustín de Vega, durante la cual se pusieron en común las medidas que se van a adoptar de cara al riesgo de nevadas en nuestra provincia.
Se expusieron diversos planes de actuación frente al mal tiempo y se determinaron las diferentes fases de alerta, que son amarilla, naranja y roja, en orden creciente según la adversidad meteorológica.
En el caso de que el Instituto Nacional de Meteorología indique que puede haber situaciones de emergencia se movilizarán a diversos cuerpos de seguridad como Protección Civil. Aunque el plan de actuación también contempla situaciones de prealerta.