Desde Puerto de Bejar hasta Cuatro Calzadas, ese es el tramo que queda por terminar de la autovía A-66. Y como ya saben los usuarios de estos tramos las obras no se van a acabar en el tiempo previsto, para el que sólo quedan 106 días y sólo parece que el tramo Sorihuela – Guijuelo será el que pudiera abrir antes del 2009.
Los tramos más avanzados son los que van desde Guijuelo hasta puerto de Bejar, aunque si analizamos los tramos, paso por paso observaremos que están muy retrasados. Una vez que dejamos la autovía, lo primero que nos encontraremos es el viaducto de Puerto, donde no están puestos los pilares, desde ahí y hasta el otro viaducto el de Bejar, se observa que está todo preparado para asfaltar. En cuanto al puente de Bejar sólo falta por finalizar la cúpula del primer pilar, aunque los enlaces entre ellos no están muy adelantados y sólo parece que se ha concluido uno de ellos en el centro del viaducto.
Si proseguimos por la carretera la mayoría de las zonas están preparadas para recibir la capa de asfalto pero las obras no están terminadas en la zona de Sorihuela en la que se está trabajando.
Desde esta población y hasta Guijuelo nos encontramos con aproximadamente 14 kilómetros en los que se puede ver que ya se está utilizando el desdoblamiento y se están realizando trabajos de mejora en el tramo viejo. Es sin duda el tramo más adelantado y el único que puede cumplir con los plazos.
El tramo Guijuelo, Montejo, el último en ser licitado, es el que va con más retraso, quizá por el largo periodo que ha estado paralizado. Las obras de este tramo, puede que obliguen al tráfico rodado a desviarse por el centro de Guijuelo durante algún tiempo, retomando la antigua N-630.
El siguiente tramo, desde Montejo hasta La Maya, tiene todo listo para recibir el asfaltado, aunque el puente de esta última localidad puede retrasar las obras.
También se van a retrasar las obras en el tramo final que llega hasta Cuatro Calzadas, que tiene diversas obras de complejidad.
En definitiva, los puentes y viaductos, junto con algunos tramos más complejos, son los que impiden que la autovía esté lista en el plazo previsto y lo más seguro es que hasta el verano del año que viene no disfrutemos de la A-66.