Lorenzo Santolino dice adiós a sus opciones en el Rally de Marruecos tras sufrir problemas con la gasolina esta vez, por una avería poco habitual, rotura de los conductos que conectan los depósitos de gasolina.
La cuarta etapa constaba con 508 kilómetros, 408 de ellos de especial cronometrada con un pequeño enlace de salida y otro de llegada en Erfoud. Santolino salía en buena posición y marchaba entre los diez primeros hasta la mitad de la jornada, cuando ha empezado a sentir los mismos síntomas de la segunda etapa. Primero notó que perdía carburante y, luego, que no llegaba correctamente al motor. El de Guijuelo se queda con las buenas sensaciones de pilotaje y navegación que ha encontrado en los días de carrera.