Y climatológicamente hablando un poco si fue así, tras el paso de lluvia torrencial. Incluso por la tempestad en forma de lesiones. Pero el rival como todo el mundo sabe fue el Arenteiro y no el Huracán Melilla, como se pude ver de forma recurrente en el acta redactada por el colegiado Javier García Rubio. Completando así una tarde aciaga, repleta de incidencias.