La cosecha de cereales en Castilla y León rondará los 6,8 millones de toneladas, lo que supone un 34% más respectos a la última cosecha de 2019 y un 20% más en relación a la media de los últimos 6 años, según las estimaciones de COAG.
En lo que respecta a nuestra provincia se prevé una subida de la producción,entre un 20 y un 30% con respecto a la última campaña.
A pesar de las buenas previsiones, el sindicato agrario ha indicado que “los agricultores temen una campaña de precios bajos porque las expectativas productivas a escala mundial muy elevadas y la volatilidad de los mercados, muy influidos por movimientos especulativos, puede convertir una buena cosecha en lo agronómico en una mediocre”.