En la trama que se remonta al año 2011, están acusados un total de cinco personas, uno de ellos ha sido detenido en Lorca, a los que se les solicitan penas que suman 31 de años de prisión, por un delito continuado de estafa y otro de pertenencia a grupo criminal por adquirir mercancías, en su mayoría de productos cárnicos y lácteos, sin abonar el importe de los pedidos.
En un principio abonaban los pedidos iniciales, para así ganarse la confianza de sus víctimas, y más tarde a realizaban pedidos mucho más cuantiosos y una vez recibida la mercancía simulaban el abono mediante pagarés los cuales, llegado su vencimiento, eran devueltos por los bancos por falta de fondos.
Los acusados a lo largo del año 2011 realizaron pedidos en distintos puntos de España, entre ellos Guijuelo, donde obtuvieron género por un importe de 446.196 euros, que no abonaron.