En estos días que tanto se habla de la España vacía, de la despoblación, hay que seguir insistiendo que en nuestra Comarca son 1.215 personas las que se han marchado en la última década.
La sangría de población afecta a prácticamente a todos los pueblos de la zona y lo vemos en los últimos diez años, la Comarca ha perdido casi un 10% de población. De un total de 13.336 vecinos hemos pasado a 12.121 habitantes, lo que supone un descenso de 1.215 personas en diez años. O lo que es lo mismo, 121 al año, 10 al mes o 3 a cada semana.
Cifras que nos invitan a reflexionar, más tratándose de una de las pocas zonas industrializadas de la provincia.
Por cierto, otro dato destacable, en este caso, en la provincia de Salamanca es que en la última década el número de pueblos con menos de cien habitantes ha crecido un 50%, hace 10 años era 53 y ahora son 75 pueblos y hay otros 8 en la frontera. Es más, en Salamanca, de los 362 municipios, 322 han perdido población.
Ale, pues a seguir dejando gobernar a los mismos, es perfecto, los votantes se van, los que gobiernan, no.
Bueno, y tampoco los paniaguados que algo tienen que agradecer.
Que futuro tan bonito¡¡¡¡.