El Guijuelo continúa con la pólvora mojada, y sigue sin ganar en el Municipal de Guijuelo. Cuatro partidos y sólo ha sumado un punto en su feudo.
El pasado sábado se media al Rayo Majadahonda, un conjunto muy serio en tareas defensivas, con buen tratamiento del balón y que a la contra, especialmente con su mejor hombre, Pichín, pudo llevarse más premio.
De inicio, Jordi Fabregat apostó por Omar Fleitas para acompañar a Carlos Rubén en el once, con el regreso de Manu Dimas en el lugar de Suárez. Estas fueron las únicas novedades con respecto a la última jornada, pero el juego y la intensidad no fueron las mismas que ante el Real Madrid-Castilla.
El juego del Guijuelo no era tan fluido como otros días, el equipo estaba muy metido en su campo y la distancia con los delanteros era muy grande, apenas llegaban balones al área rival y la presión brillaba por su ausencia. Lo más destacado fue un disparo de falta, muy lejano, botado por Raúl Ruiz que detuvo sin problemas Basilio. El rival poco a poco se hacía con el control del encuentro y aunque también llegaba tímidamente al área rival lo hacía con más claridad.
En el segundo acto, parecía que el Guijuelo salió con más intensidad pero duro poco tiempo, e incluso el Rayo Majadahonda se pudo adelantar en el marcador en el minuto 51, saque de falta a favor del Guijuelo por parte de Manzano, error en la estrategia, y contra del equipo rival, el esférico le llega a Pichín que manda el balón al palo, aquí pudo terminar el partido. El Guijuelo se animaba a base de arreones, pero las ocasiones seguían sin llegar, es más el Majadahonda tuvo otra ocasión muy clara, en un disparo de Pichín que tiene que salvar Kike Royo en una gran intervención.
A pesar de todo, el Guijuelo también pudo ganar el partido en una jugada de Pino que le regala el balón a Cifo que sólo ante el portero manda el balón fuera. Al final reparto de puntos, y lo más preocupante es que el Guijuelo sigue en descenso y sin marcar en casa.
Este Guijuelo huele a tercera que apesta… 3 goles en 720 minutos son números de descenso, además se generan muy pocas ocasiones de gol y si no se presiona al equipo rival y se juega sin intensidad, lo normal es perder, como ya pasó contra el Cerceda, Fuenlabrada y Ferrol. De los fichajes, sólo se salvan Fuster y Manzano, los demás no tienen nivel ni para jugar en tercera…