El Guijuelo perdió la primera de las nueve finales que le quedaban en casa para conseguir la permanencia. Sin duda, fue el peor partido de la era Fabregat y lo más preocupante es que al equipo se le ve muy tocado anímicamente.
Los guijuelenses llegaban a este choque con la necesidad de sumar de tres en tres. De partida, Fabregat apostó por una línea de cinco, con la entrada de Héctor en lugar de Jonathan Martín, Carmona ocupó un puesto en el centro del campo, mientras que Dimas acompañó a Pino en punta de ataque. Al equipo le volvió a faltar, una jornada más, fluidez en el centro del campo, donde se echa en falta a jugadores como Luque o Néstor Gordillo, es decir ese jugador que le de pausa al juego, que le de criterio y que además aporte el pase final. Ayer no hubo juego, a los jugadores se les notaba agarrotados y con miedo de coger responsabilidad, sólo Pino, Ángel o Raúl Ruiz mostraban peligro en zona de ataque. A la falta de fútbol hay que sumarle la falta de acierto en el juego de estrategia, donde en la Segunda B, a balón parado se deciden el 75% de los partidos.
A pesar de todo, el Guijuelo creó dos acercamientos a portería en la primera mitad, en el 26, ni Pino ni Carmona llegan a un buen centro de Dimas y en el 43, una jugada entre Pino y Ángel termina con una buena intervención de Porrón. Por su parte, el Lealtad, un equipo muy bien trabajado y que sabe a lo que juega, se limitó a estar bien plantado sobre el terreno de juego, sin despeinarse y a esperar el fallo del rival, que llegó en la segunda mitad.
En la reanudación, el Guijuelo apretó a su rival, le metió en su campo e incluso hizo intervenir al guardameta Porrón en varias ocasiones, hasta que llegó el primer regalo de los locales en el minuto 59 y el Lealtad como era de esperar, lo aprovechó. Fallo defensivo en la salida, el balón le golpea a David se lo queda y supera a Kike Royo por el palo largo. Duro golpe para el Guijuelo. Desde el banquillo se reaccionaba con la entrada al campo de Luque y Gordillo pero no fue suficiente porque diez minutos después llegaría el 0 a 2, de nuevo obra de David y al minuto el tercer tanto, de nuevo con el protagonismo de David.
Al Guijuelo se le fue una oportunidad de sumar tres puntos, todavía quedan ocho finales en casa y el domingo visitan al Valladolid B. La reacción tiene que llegar, porque el Guijuelo está jugando con fuego y dormirá una semana más en puestos de descenso.
Una de las noticias en positivo fue la presentación en el día de ayer del nuevo jugador del C.D. Guijuelo, Pablo Ortiz, que entró en la convocatoria de 18 jugadores pero no disfrutó de minutos.