Además de la jornada matancera propiamente dicha, la fiesta matinal del domingo acogió el vigésimo capítulo de la cofradía gastronómica, que en esta ocasión centró su homenaje en la figura de Goyo Llorente.
Este guijuelense, que ha sido miembro destacado de la Cofradía gastronómica de Guijuelo recibió un caluroso reconocimiento de los asistentes a la fiesta matancera y especialmente de sus compañeros. Los cofrades agradecieron la labor que Goyo Llorente viene desempeñando desde hace años en su agrupación.
Por otro lado el homenaje contó también con la bienvenida de la Cofradía Gastronómica a Goyo Llorente, hijo, que se unió ayer a la asociación y que tomó la indumentaria de cofrade de manos de su padre, en un momento muy emotivo.