Al Guijuelo se le está cruzando la entrada en la segunda parte de la Liga. De seis partidos disputados ha perdido cinco de forma consecutiva. En el mundo taurino se dice que no hay quinto malo, pero para el Guijuelo lo hubo. Principalmente porque no estuvo a la altura que se le supone al quinto clasificado de una Liga de 20 equipos, cuando se mide al penúltimo. El Guijuelo estuvo timorato, recogido y durante muchos minutos temeroso, compungido y hasta desquiciado. Que el Guijuelo tiene un problema no es nada nuevo, pero el pasado sábado, con un once más propio de la primera vuelta, regresó a su presente, al de los miedos, al de los errores, al de las derrotas.
El partido estuvo desde el principio muy igualado. Algo que a priori no debería de darse cuando sobre el papel hay tanta diferencia entre uno y otro. A pesar de ellos, el corazón se iba imponiendo a la cabeza y a base de empuje y de ganas los locales se fueron haciendo con el poco peligro que se generó en el área contraria. El filial gijonés, sólo hacía daño por su derecha con los centros de Guille y por dentro con la presencia de Mendi y a pesar de saberlo y a pesar de reconocerlo una doble acción de ambos jugadores acabaron, en la segunda mitad con el partido. Centro Guille, marcó Mendi y el partido se acabó. Eso sí, no sin que el Guijuelo a base de corazón lograra tener alguna ocasión para empatar. Quizá lo más justo hubiese sido un empate a cero, pero en fútbol el que se equivoca la paga y es más, en fútbol normalmente el que no da el cien por cien acaba perdiendo. Y otra vez un rival del Guijuelo se queda con los tres puntos, sin apenas ofrecer nada, un poquito de orden defensivo, un par de llegadas y suficiente para ganar un partido.
El gran inconveniente es ahora la dinámica negativa que vuelve a implantarse en el Guijuelo una semana más, es aspecto anímico fue determinante y lo seguirá siendo.
Después de cinco derrotas consecutivas el equipo está muy dolido, pero tiene que seguir trabajando y lo que es más importante tiene que volver a su posición, a la que el conjunto a demostrado que merece por calidad y por capacidad, aunque ahora estén atravesando por un momento difícil.
El Guijuelo volvió a perder, pero aún así continúa quinto en la clasificación, un poco más lejos del play off pero aún en la lucha.
A qué está esperando la Junta Gestora para echar a este aprendiz de entrenador que ha destrozado el equipo???