La Junta de Castilla y León intensificará el control y la inspección del suministro de setas silvestres y las piezas de caza por parte de recolectores y cazadores a establecimientos de restauración y hostelería de la Comunidad.

Con la llegada del otoño aumenta el número de recolectores de setas y cazadores que salen al campo en busca de los productos que ofrece la naturaleza, debido a este aumento, la Junta de Castilla y León, ha decidido aumentar la observación que se realiza en este aspecto, ampliando la vigilancia para que no se realicen suministros de alimentos no controlados.

De este modo, Sanidad ha encomendado a los profesionales de la salud pública que realicen inspecciones fuera de los horarios habituales con el fin de encontrar la entrega de alimentos no autorizados que se dan principalmente en establecimientos minoristas o de restauración y hostelería

La comercialización de estos productos de manera no reglada, pueden entrañar un riesgo para la salud pública por lo que es preciso un control sanitario a través de los canales de comercialización autorizados. Por este motivo, en lo referido a las setas, la Junta trabaja en la adaptación de la normativa nacional que en la actualidad prohíbe el suministro de hongos y setas por parte del recolector directamente al consumidor final o a establecimientos.

En lo que se refiere a la caza silvestre, esta sólo puede ser comercializada a través de salas de tratamiento autorizadas e inscritas en el registro general sanitario de empresas de alimentos.

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