La falta de lluvias sigue preocupando al sector agrícola, que ven peligrar sus cultivos, sobre todo el de cebada, siendo el más tempranero de todos.
Desde Asaja Salamanca, han calificado como desastrosos los pronósticos para el cereal. De continuar sin precipitaciones durante las próximas semanas de este mes, la cosecha de cebada podría ser totalmente inexistente en la provincia y el trigo apenas alcanzaría los 1.500 kilos por hectárea.
Se cumplen así, los peores pronósticos que ASAJA SALAMANCA anunciaba, el pasado mes de marzo, vaticinando una primavera complicada para los cereales y los pastos.
Al observar los campos cerealistas, se puede ver la escasa altura que tienen los pastos y se prevé que no se recogerán más de mil kilos de media por hectárea, que sumados a la reducción de terreno sembrado, hacen pensar que será uno de los peores años, superando incluso las cifras del 2005.
La situación parece inquietante como han denominado desde Asaja y si no vienen las lluvias en los próximos días la cosecha de cereal sería prácticamente inexistente para el mes de julio.