La industria local apuesta fuerte por el trabajo de la mujer dentro de la chacinería. En los últimos tiempos se multiplican las empresas que poseen un alto número de trabajadoras femeninas en sus plantillas.
Además, cada vez, son más las mujeres que trabajan en la chacinería y no exclusivamente para labores menores o de limpieza. Así, se puede ver a las mujeres escogiendo magro, embutiendo o envasando en numerosas fábricas.
Este aumento de la mujer en el número total de trabajadores ha limitado la mano de obra inmigrante que no llega al 10% en algunos centros de trabajo, según indica la Gaceta Regional de Salamanca en su edición de hoy, en la que se pueden leer declaraciones de Juanma Ramos, de Comisiones Obreras, que manifiesta que los extranjeros “son los primeros que salen de las fábricas”.
Por su parte, la Asociación de Industrias de la Carne, ha manifestado que la crisis no se nota en el sector de los trabajadores inmigrantes ni tampoco en los operarios locales. Ya que la reducción de la actividad en verano es algo que tradicionalmente se hace todos los años.