Conocer la naturaleza y plantar un árbol. Esos fueron los dos objetivos que se marcaron los más de cien padres y alumnos que visitaron Fuenterroble en el día de ayer.
Los visitantes llegaron en torno a las diez de la mañana a la cercana localidad, donde fueron recibidos por miembros del albergue del peregrino. Uno de los principales objetivos de la excursión era concienciar a los niños en el respeto hacia el medio ambiente. Algo que se lograron con la plantación de una quincena de árboles en un paraje conocido como la calera, hasta donde fueron llevados los alumnos a bordo de carros tirados por burros.
De vuelta en Fuenterroble, comieron el albergue y visitaron la localidad, incluida la zona de visitantes en la iglesia. Ya de regreso a la capital salmantina hicieron parada en Salvatierra para admirar las ruinas del castillo y las vistas al Pantano de Santa Teresa.